El paso del Ciclón Idai por el centro de Mozambique, y las inundaciones que siguieron, dejaron un rastro de destrucción y daño, tanto humano como material, de valor incalculable. Se estima que más de 2,8 millones de personas fueron afectadas por el ciclón. Ninguna de las oficinas y fábricas de las empresas del Grupo IBG se vio afectada geográficamente, pero esta es, naturalmente, una causa que nos conmueve.

En solidaridad con esta tragedia, nos unimos a la Cruz Roja Portuguesa donando tabletas de purificación de agua que se utilizarán para hacer que el agua sea segura para el consumo humano, ayudando a prevenir la propagación de epidemias favorecidas por el agua estancada y la falta de condiciones de higiene como la malaria, el cólera, el dengue y el Zika.

En una iniciativa conjunta con Tensai y Europa Ar-lindo, también reunimos materiales para apoyar la reconstrucción de una escuela para que los niños puedan volver al aprendizaje. Los contenedores ya están cargados y en camino hacia Mozambique. Reconstruir la infraestructura y el tejido social y económico es una prioridad para Mozambique. Hacemos nuestro compromiso de ayudar en todo lo que esté a nuestro alcance.